Con eso de que las noticias se solapan unas a otras, en épocas en las que los titulares buscan otros objetivos, pueden meterse muchos goles sin que nadie se entere. Por eso estos días conviene leer la letra pequeña, meditar algunas decisiones políticas, y sacar conclusiones.
Foro aspira a continuar gobernando en nuestra ciudad, pero sabe que sus posibilidades son escasas, entre otros motivos porque muy pocos votantes de Podemos podrían entender que siguiese en el poder con la ayuda, por activa o por pasiva, de quienes están en condiciones de cambiar el rumbo de la política. Por eso estos días también se dedican a limpiar sus mesas y destruir algún que otro papel.
Rafael Felgueroso, muy solemne él, hace unas horas afirmaba en los medios de comunicación locales y regionales, que Foro se limitará en el Ayuntamiento de Gijón a «tramitar asuntos de carácter ordinario«, sin comprometer el futuro en esta época de interinidad. Pero no es así, y el hecho de que se apruebe el proceso de licitación para contratar el servicio de conservación e instalación del sistema centralizado de control de tráfico de la ciudad, que moviliza 9 millones de euros, parece indicar lo contrario.
Pero de rondón, y a la chita callando, se cuela el sufragar a El Comercio con 20.000 euros un proceso de digitalización. ¿Y eso qué es?; porque entregar a una empresa privada más de 3 millones de las antiguas pesetas sin explicaciones detalladas suena muy mal.
El Comercio se ha distinguido en los últimos años por promocionar al partido de Álvarez-Cascos sin disimulo alguno. ¿Toca ahora pagar favores en tiempos de despedida?. Es de confiar que aprendan los que vengan, porque estos tics convulsivos poco edificantes deben de desaparecer de la política; y cuanto antes mejor.