La contrarreforma educativa quizás sería comprensible en una postguerra fatídica pero es injustificable con un capitalismo sin enemigo a combatir
Sr. Wert: Lo reconozco: estoy obsesionada con usted. Ha conseguido soliviantar mi memoria, tan acallada y vestirla de luto. Me presento: exprofesora de la Universidad de Oviedo, jubilada. En tiempos inicuos de la patria, nací a este mundo, un día de Abril del año que inauguró el Nuevo Orden de fasces y lágrimas; de espesos… Leer más »